26 de marzo de 2015

mis amigas andan como oveja sin pastor

Uno de los muchos y complejos fenómenos que se producen en una situación cara a cara es la sincronicidad imitativa de los movimientos corporales, especialmente cuando la comunicación que se establece se caracteriza por una cierta "intimidad". #

Basta con observar una conversación entre terceras personas a cierta distancia, o interrumpir el sonido del televisor durante la emisión de un debate, para ver aparecer de forma manifiesta la multitud de movimientos que esbozan, a menudo tan sólo de forma incipiente y vaga, contenidos del discurso. Una parte de estos gestos son sincrónicos, imitativos de los gestos del otro interlocutor.

# Pero ¿por qué hace la gente esto?

Creo que esto ocurre debido a que la sincronicidad corporal transmite un mensaje que es de vital importancia para nuestra relación con otros: yo puedo sentir como tú sientes; yo soy como tú. #

¿Puede ser que esta capacidad "imitativa" en la gestualización abarque también la capacidad del ser humano de sentir realmente, corporalmente, aquello que el otro siente, su "felt-sense" (Gendlin), esta sensación difusa y general acerca de... Si esto fuera así, entonces tiene mucho más sentido este "penetrar plenamente en el mundo de los sentimientos y significados del otro" del que hablaba Rogers. #

Esta experiencia sentida o sensación general o auto-sincronía significa darse cuenta de lo que estamos experimentando directamente en nuestro interior, sin la influencia mediadora de pensamientos, creencias, evaluaciones etc. Incluye sentimientos, emociones y sensaciones que surgen del propio cuerpo. #

La experiencia no es "subjetiva". Es tan público e interaccional como el propio lenguaje. La "sensación general" es la interacción corporal con las diferentes situaciones, #  captadas no tanto a nivel conceptual como de modo afectivo, postural, motor, corporal en definitiva. #

Es más, cuando una persona, en una situación de interacción, comunica algo de su estado interno, el receptor suele percibir si el contenido de la comunicación verbal es genuino, en el sentido de si aquello que se comunica responde exactamente a lo que se siente, o más bien se percibe un desajuste entre lo que se dice y lo que realmente se transmite. Cuando notamos un desajuste entre la comunicación verbal y la no-verbal, cuando las palabras "dicen" una cosa y el cuerpo expresa otra, nos sentimos "engañados", o notamos que esa persona en cuestión "no dice la verdad".

Pese a ello, sin embargo, a medida que las personas crecemos, solemos aprender a desligar nuestro cuerpo -expresiones faciales, tono de voz, respiración, postura, mirada...- de nuestro discurso hablado, quizás por prejuicios sociales, normas, valores o cualquier otra causa posible. Día tras día ocultamos a ese desnudo ser humano. Mantenemos un celoso control para que nuestros cuerpos no pregonen mensajes que nuestras mentes, por descuido, no logran ocultar. Sonreímos constantemente como forma de justificación, de defensa o de excusa.

La capacidad humana de crear un lenguaje funcional de uso diario, escindido del cuerpo, es notable. Al mismo tiempo, silenciar la propia voz para proteger alguna sensación o relación quizás tenga sentido y se logre fácilmente; mucho más difícil, aunque igualmente posible, es silenciar también las expresiones de nuestro cuerpo. Y la escisión del lenguaje y el silenciamento del cuerpo constituyen, al parecer, el suelo donde crecen los síntomas de la patología.

Rogers descubrió, sin duda, que desde el interior de las personas surge un proceso de autopropulsión hacia el cambio y el crecimiento. Para facilitar este despliegue eliminó todo tipo de respuestas interpretativas y, en su lugar, las sustituyó por la aceptación incondicional y la empatía para tratar de captar exactamente lo que el paciente intentaba transmitir.

Usando palabras de Gendlin: "El experienciar es un aspecto del vivir humano que es constante, es el constante, siempre presente, fenómeno soterrado del vivir interior. Dentro del experienciar yace el dato interno de lo que uno tenía que decir... La experiencia real es mucho más específica y rica que lo que representan nuestros conceptos... La experiencia viva es un rico tejido que no puede ser enmarcado en conceptos. Se puede tener sólo de forma sentida corporalmente".

Me parece que, en la medida en que un facilitador no sea capaz de discriminar sus propios sentimientos de los del otro y se identifique con los sentimientos del otro o, inconscientemente, proyecte sentimientos propios en su percepción de la experiencia del otro, o de cualquier otra forma confunda las experiencias del otro con experiencias que tienen su origen en sí mismo, su comprensión empática se verá reducida.

No siempre me resulta fácil mantenerme en contacto con mi propio interior y atender a mi experiencia. Sin embargo, siempre que confío en mi propio organismo de manera total y consigo que surja de mi sentir corporal una especie de conciencia intuitiva. # Este proceso parece tener lugar como en un flash, y creo que tiene que ver con el resplandor inconcebible de la capacidad intuitiva que se siente libre de amenazas racionales y se permite acontecer sin restricciones.

He llegado a pensar que es reafirmando la conexión con mi propio núcleo interno cuando siento diluirme en el otro, y no al revés, es decir, cuando me escucho a mí mismo y en este escucharme auténtico voy superando los límites de mi yo, y en este saltar límites me hago vulnerable y sigo despejando las capas de las fronteras de mi conciencia, como si fuera pelando una cebolla, dejando que resuene en mi núcleo la manifestación del otro, entonces es como me siento confluir en el abismo situado debajo de la conciencia del otro. Quizás, en las profundidades, somos todos uno. #

Al conseguir otorgar significado a esta "sensación sentida" que surge como globalidad de algo, parece como si sintiéramos un alivio y el propio cuerpo nos indicara un nuevo paso, una nueva dirección. Se trata de descubrir cómo el cuerpo ya sabe lo que la mente todavía desconoce, y posibilitar una relación de confianza con nuestro cuerpo que nos permite ponernos en contacto con la sabiduría interior.

Tomeu Barceló
Cuerpos que escuchan : El acontecer de la empatía desde el proceso del enfoque corporal. Comunicación al X Foro Internacional del enfoque centrado en la persona.