12 de enero de 2016

hoy tocaba matrona, se le oía alto y claro, ya se puede decir


como bajan la lluvia y la nieve del cielo, y no vuelven allá sino después de empapar la tierra, de fecundarla y hacerla germinar, para que dé semilla al sembrador y pan al que come, así será mi palabra, que sale de mi boca, no volverá a mí vacía (Is 55, 10)